Sandra García: Vivir para el teatro.

CHEVERE NEWS.
Por Franklin Virguez.
Publicado el 08-04-2008.

Me interesa más el teatro de arte.

Sandra y Ernesto García solo creen en la filosofía del trabajo. Para esta pareja no hay descanso, la labor creativa no tiene tregua. Sandra Rosa García es licenciada en artes escénicas con especialización en actuación en el Instituto Superior de Arte en La Habana. También ha cursado estudios, sobre la misma materia, en La Universidad Internacional de La Florida. Es profesora de actuación, actriz en cine, televisión, radio, y por supuesto que en el teatro. Ella se mueve como pez en el agua cuando de actuación se trata, durante años se ha preparado y es una de las mejores actrices de habla hispana, y lo invito a que lo compruebe visitando El Teatro Estudio en la mismísima Calle 8 o sintonizando cualquier telenovela.

Sandra, gracias por acceder a esta entrevista. Dígame, ¿De que hora a que hora piensa en la actuación?

Pienso en la actuación cada hora de mi día, es mi mayor pasión, mi manera de ver el mundo, de entenderlo y de vivirlo. Creo que todos los actores somos muy afortunados de tener la posibilidad de vivir otras vidas, otras culturas a través de los personajes que representamos. Esta es una profesión maravillosa, noble y que nos permite crecer mucho como seres humanos.

¿Y a que edad ocurrió el deseo de convertirte en actriz?

Comencé mi Carrera como actriz a los 7 años. Mi abuela me llevo a estudiar piano a la Casa de Cultura de mi pueblo natal y para mi fortuna, justo al lado de las clases de piano, un maestro maravilloso enseñaba a declamar. Inmediatamente abandone el piano y me convertí en actriz. Trabaje mucho, ensayábamos todos los días y cada mes estrenábamos una obra de teatro. Viajábamos a todos los pueblos cercanos de nuestra ciudad presentando nuestras obras. Desde pequeña estudie mucho actuación, conocí los clásicos y leía desenfrenadamente. Actuar era mi pasión, mi vicio. Cada vez que íbamos a un pueblo de campesinos y veía en las caras de los niños el deslumbramiento que provocaba en ellos el teatro, sentía una felicidad sin límites. A los dieciséis anos me gané una beca para estudiar Artes Escénicas en el Instituto Superior de Arte en la Habana y después de cinco arduos años, fui seleccionada para integrar la compañía Teatro Estudio, la más prestigiosa compañía teatral en mi país, bajo la dirección de mi maestra Raquel Revuelta. Allí protagonicé muchísimas obras hasta mi salida a los Estados Unidos en 1995.

Aquí...bueno, ha llovido mucho. Nunca he dejado mi carrera, al contrario. A pesar de que Ernesto y yo tuvimos que trabajar en lo que apareciese para poder sobrevivir, nunca dejamos al lado nuestra profesión. Ya a los tres meses de estar aquí estrene mi primera obra y comencé a impartir clases de actuación en la Universidad Internacional de la Florida y después en Miami Dade College. Durante estos anos he dirigido veinticinco producciones teatrales, he formado a más de 3,000 actores y he trabajado mucho como actriz en el teatro y en la televisión. Trabajos todos que han marcado mi vida y me han dado mucha felicidad.

¿Vale la pena el sacrificio, el trabajo, el soñar ser actriz?

El 13 de Julio del año pasado, Ernesto y yo abrimos nuestra sala de teatro en el corazón de la Pequeña Habana. Ese día fue uno de los días más felices de mi vida. Al finalizar nuestra obra “Sangre” y viendo como el público aclamaba nuestro trabajo, pensé justamente en esta pregunta que ahora me haces. Si Franklin, vale la pena el trabajo, el sacrificio, el sueño. Vale la pena los desvelos y en muchas ocasiones las frustraciones si el resultado es esta sala de teatro que con tanto amor hemos construido y que ya en su año de vida ha presentado a un público ávido de ver buen teatro, dieciocho producciones diferentes. Vale la pena, créeme, es una sensación única el sentir el aplauso del publico, su energía, sus comentarios y su confianza.

Se habla con frecuencia en el circulo teatrero sobre el teatro serio, para usted, ¿que es teatro serio y que no es teatro serio?...

Mira yo creo que todo el teatro que se hace con compromiso, es teatro serio. A mi particularmente me interesa mas el teatro de Arte, un teatro de texto, un teatro que nos eduque, que aglutine a todas las otras artes (la plástica, la música, la danza) y sobre todo un teatro que sea hecho por un grupo humano con un mismo interés artístico y con un entrenamiento que le permita continuar creciendo como actores y creadores.

¿Stanislavsky o Brecht?

Soy muy inclusiva, trabajo a todos los maestros, cada uno es diferente y aporta algo específico. En mis talleres de actuación trabajo desde Stanislavsky hasta Grotowsky y Barba. No tengo preferidos. El teatro es un arte vivo que crece y se desarrolla mucho. Hay que estudiar y estar siempre al tanto de las últimas técnicas que desarrollan el trabajo del actor.

Está casada con un hombre que lo hace todo en la compañía, el día apenas tiene 24 horas ustedes trabajan 30, tienes hijos, ¿hay espacio para el amor, la caricia, un poco de sexo, o todo lo desembocan en la creación teatral?...

Tengo la suerte de estar casada con Ernesto García, un hombre excepcional, un ser del renacimiento. Ernesto es escritor, músico, director, diseñador. Tiene una capacidad creativa y de trabajo impresionante. Pero lo más importante es su capacidad de amar, su pasión y su humildad. En nuestros dieciséis años de matrimonio no ha dejado ni un solo día de enseñarme, de divertirme y de darme su apoyo. Hemos trabajado sin descanso, como bien acotas, pero siempre ha habido tiempo y deseos para el amor, es lo que nos hace ser lo que somos.

¿Déme una razón para que el publico, vaya a verlos?....

Que hacemos un teatro comprometido con el arte, que somos creadores incansables que abren las puertas de nuestra sala teatral con pasión para todo tipo de público y que siempre el espectador que nos acompañe saldrá con la sensación de haber visto una puesta en escena que los divertirá, los estremecerá y los hará pensar.

El día que preparen maletas para ir a La Habana a presentarse con la compañía en Cuba, ¿qué obra representarían para ese momento importante para usted? o ¿cuáles serían las piezas escogidas para la ocasión, usemos la imaginación.

Me encantaría que ese día llegara pronto. Creo que llevaríamos la puesta en escena que estamos presentando ahora “El Reloj Dodecafónico”. Una obra maravillosa que nos hace viajar en el tiempo y pensar mucho sobre nosotros mismos y nuestra responsabilidad para con los demás.